La evolución del ser humano, en
la manera de desplazarse, provocó y provoca, el cambio en sus necesidades como
viajero. Hubo dos cosas que marcaron esta evolución del ser humano como
viajero: La rueda (3.500 a.C.) y la escritura (4.000 a.C.).
La aparición de la escritura
amplio el conocimiento del viaje. Aparte de la lectura de las estrellas para
orientarse en el viaje, se sumaba la descripción de las rutas y los paisajes
que se iban recorriendo, las experiencias que vivían y los conocimientos que se
adquirían. Aquellos viajeros y escritores plasmaron sus vivencias en libros que
después leerían otros futuros viajeros que ansiaban conocer los lugares
descritos en aquellas obras. Comerciantes como Marco Polo, historiadores como Heródoto
o Jenofonte, militares como Alejandro Magno o Julio Cesar o científicos /
naturalistas como Darwin pusieron su granito de arena en los sueños de todos
aquellos que los leían y que buscaban un argumento para desplazarse lejos de su
lugar de residencia. Sin saberlo se iban creando las guías de viajes que, a
partir del siglo XV, con el invento de la imprenta, se consiguió que, estos
escritos, llegaran hasta nuestros tiempos.
Algunos autores opinan que las
cosas o los lugares no pueden considerase actores influyentes de un destino
turístico, ya que no son capaces de opinar, gestionar o transformar, cosa que
los actores “humanos “si pueden hacer. Pero lo que no se puede negar es que, el
atractivo turístico, provoca opinión y gestión por parte de sus usuarios
turísticos, dando como resultado el rechazo o aceptación de éstos, por lo que
los actores turísticos humanos y los actores turísticos no humanos tiene la capacidad
de influir en el futuro de un destino.
Ejemplos hay muchos, pero quizás
el más destacado se encuentra en algunos destinos vacacióneles (algunos de
ellos maduros) que, tras el descubrimiento de sus maravillosas playas, por
viajeros aventureros, ahora son conocidos por su ambiente de ocio nocturno, y a
eso dedican sus esfuerzos de publicidad, convirtiendo el ocio nocturno en el
primer atractivo de la destinación, olvidando el atractivo autóctono y
dividiendo a los habitantes del destino. La pregunta sigue sin respuesta: Si no
existiera la maravillosa playa ¿continuaría siendo, el ocio nocturno, un
atractivo turístico? No podemos olvidar
cual fue el origen del destino y que lo demás son servicios que ayudan a
disfrutar de este atractivo o entorno turístico, aunque algún servicio destaque
y atraiga a visitantes al destino.
Los atractivos o entornos
turísticos deben poseer ciertos valores generales que seduzcan a los visitantes
por diferentes motivos. Podemos describir diferentes valores que se les
espera que tengan los atractivos o entornos turísticos como principal actor del destino. En la figura
siguiente se pueden observar algunos de estos valores. En el Cuadro de Valores
se deja abierta la posibilidad de añadir nuevas características de los valores
en el caso necesario,
Cuadro de Valores de un Atractivo Turístico
1. Valores
de Deseo. Forma parte del sueño de un potencial usuario turístico inducido por
inputs o comunicaciones que le han llegado de diferentes canales. Estas
comunicaciones se alienan con su manera de pensar y actuar, convirtiéndose en
un deseo que podrá libremente escoger y del cual espera recibir, como mínimo,
lo comunicado por dicha información llegando a la satisfacción de sus deseos. Las
características de estos valores son:
-
Deseado. Que formen parte de sus sueños
(objetivos)
-
Escogido. Que pueda ser escogido libremente
-
Recibido. Que reciba lo que ha deseado (según lo
comunicado)
-
Satisfecho. Que sienta satisfacción. Que lo
deseado se convierta en realidad
2. Valores
de Necesidades. Es el aumento del deseo. El sueño se convierte en una
posibilidad real y el potencial usuario turístico empieza a moverse para poder
utilizarlo /consumirlo. Su utilización, tal y como se le ha comunicado puede
satisfacer sus necesidades y espera que la comunicación que le ha hecho
convencer de esta necesidad le produzcan recuerdos.
-
Utilizado. Que sienta la necesidad de utilizarlo.
-
Satisfecho. Utilizado satisfactoriamente.
Facilidad de uso.
-
Recordado. Que aporten recuerdos únicos e inolvidables. A ser posible que sean positivos
3. Valores
de Estatus social. La satisfacción del deseo y de la necesidad y su posterior
cantidad de recuerdos gravado, convierte al atractivo o entrono turístico en un
éxito personal, ya que una parte de su vida estará marcada por estos recuerdos
y que, seguramente, habrá compartido con todas sus amistades en sus redes
sociales, obteniendo un protagonismo momentáneo.
-
Exitoso. Que se convierta en éxito personal.
Conseguir “likes”.
-
Difundido. Que se pueda difundir y compartir
fácilmente
4. Valores
de Seguridad. El atractivo o entrono turístico ha de ofrecer ciertas reglas de
utilización que faciliten la convivencia entre los visitantes, de manera que la
heterogeneidad de éstos no dificulten la satisfacción de usarlo. No todos los
usuarios turísticos pretenden utilizar el atractivo o entorno turístico de la
misma manera. El atractivo o entorno debe ser autóctono del lugar donde está
ubicado o tener una especialización que capte el deseo y la necesidad de los
potenciales usuarios turísticos. Lo primordial es que han de ser aceptado tanto
por actores locales como por actores visitantes para que el atractivo pueda
permanecer en el tiempo debe ser:
-
Utilizado. Tener unas reglas de utilización que
facilite el uso y comportamiento
-
Autentico. El usuario turístico debe comprender
el significado y la importancia del atractivo o entorno turístico.
-
Aceptado. Los habitantes locales, como
consumidores del atractivo o entorno turístico deben aceptar el compartir el
atractivo o entorno turístico y también deben seguir las reglas de utilización.
-
Legalizado. Las leyes han de servir para la
protección del atractivo y entorno turístico, ya que no solo es un reclamo
turístico, sino que también es una identidad cultural o paisajista local.
-
Protegido. La difusión de unas normas mínimas de
utilización, avaladas por las leyes, le protegerá de comportamientos incívicos
y le mantendrán como algo autóctono, único e irrepetible, listo para ser
disfrutado y admirado por sus visitantes.
-
Sostenible: Los atractivos o entornos turísticos
lo son porque, en el pasado, alguien vio la necesidad de visitarlo, utilizarlo
y disfrutarlo, y esta necesidad ha continuado en el tiempo. La obligación de
los actores del destino es protegerlo para las futuras visitas, utilización y
disfrute de las próximas generaciones de usuarios turísticos
El turstólogo, como diseñador y gestor de los servicios debe conocer donde ubica su servicio en relación con el atractivo o entorno turístico, para poder estar subido al carro de las estrategias del destino turístico al que pertenece. La conexión entre el atractivo, los servicios ofrecidos y la gestión del destino es primordial para la subsistencia de los actores turísticos.
Narcís Martí Fabregó